La Sociedad Española de Bioquímica y
Biología Molecular, SEBBM, se propuso pulsar la opinión y las propuestas de los
partidos políticos españoles ante la inminencia de la convocatoria a elecciones
generales. En tal sentido realizaron una serie de preguntas a contestar por los
partidos políticos involucrados. Cuatro de los siete partidos políticos
participantes contestaron las preguntas vinculadas con: aspectos concretos
relacionados con las financiación y organización del sistema científico, la
problemática de los investigadores y su carrera profesional, la inversión y la
oportunidad de aumentar la cantidad de instituciones científicas, la
especialización de las universidades, cómo mejorar los indicadores en
innovación en el país (España ocupa el puesto 40 en innovación en el mundo y el
19 en Europa)… Las respuestas dadas por los cuatro partidos, según la SEBBM,
oscilan entre el aprobado justo y el suspenso. Las razones de la pobre
calificación son el manifiesto desinterés detectado, comentarios centrados en
generalidades y la falta de iniciativas políticas importantes o de peso para el
sector.
Por lo general poco
conocen los votantes sobre las propuestas en política científica y tecnológica de
las distintas fuerzas políticas. Por una parte debido a la falta de su
comunicación por los políticos y, por la otra, al aparentemente poco interés de
los votantes inmersos en las problemáticas de la inmediatez cotidiana. Ambos
parecieran no tener conciencia sobre la influencia central del desarrollo
científico-tecnológico en la capacidad del país para generar productos y/o
servicios con valor agregado, en la mejora de la competitividad y en la incidencia
económica de la innovación.
Ante la cercanía de
las próximas elecciones preguntemos a los políticos de nuestro país ¿Cuál es tu
proyecto político concreto en ciencia y tecnología? Una buena forma
de comenzar a distinguir las voces de
los ecos.
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