David Trejo. Prof. de Nanoelectrónica. CAECE |
En
el artículo publicado el 3 de septiembre del 2016 (Biotecnología &
Nanotecnología al Instante) decíamos sobre la posibilidad de fabricar cerebros
cuasi similares: “Los nanochips neurosinápticos fueron desarro-llados por IBM
(TrueNorth). Cada nanochip equivale a 1 millón de neuronas y 256 millones de
sinapsis programables a través de 4.096 núcleos neurosinápticos individuales.
Estos nanochips cuentan con una cifra record de 5.400 millones de transistores
por centímetro cuadrado. El nanochip neurosináptico integra a la capacidad de
procesamiento matemático de las computadoras clásicas, equivalente al lado
izquierdo del cerebro, con la capacidad adicional de imitar el lado derecho
dónde impacta la información percibida por los sentidos, pudiendo procesar
imágenes y la información recibida por una cantidad casi ilimitada nanosensores
para responder y resolver con inteligencia complejas situaciones”…”No obstante
el cerebro humano tiene una parte de ordenador analógico extremadamente
compleja. Su evolución se basa en sus experiencias previas y hasta ahora esta
funcionalidad no se pudo reproducir de manera adecuada con la tecnología
digital. El desarrollo de nanomemorias tipo memristor (resistencias de memoria)
constituye un requisito previo para la construcción de redes de neuronas
artificiales capaces de igualar el rendimiento y la funcionalidad de sus
homólogos biológicos. A partir del año 2008 comenzó a confirmarse la
posibilidad de un nuevo componente, el memristor, capaz de comportarse de
una manera similar a las sinapsis de las neuronas dentro del cerebro humano. La
resistencia a la corriente dentro de un memristor es el producto de las
corrientes que han fluido previamente a través de él. La corriente fluye cada
vez más fácil cuanto más fluye una corriente previa. Debido a estas
propiedades los memristores tienen a constituir una memoria no volátil y
permiten producir computadoras mejoradas en la comprensión del habla, las
imágenes y el mundo que les rodea”. Esta semana el MIT (Massachusetts Institute of Technology) distingue al Ingeniero David
Trejo, profesor de electrónica y Nanoelectrónica de la Licenciatura en
Nanotecnología (Universidad CAECE) por sus “chips neuromórficos que
prometen potenciar las capacidades de la informática”. El informe del MIT
señala “La informática ha evolucionado desde ordenadores que ocupaban
habitaciones enteras con capacidades ínfimas hasta computadoras tipo smartphone que
caben en un bolsillo y cuya potencia supera a la nave espacial de la misión
Apolo 11. Y, dado que la electrónica y la informática siguen avanzando, puede
que dentro de un puñado de años la potencia computacional de los aparatos que
usamos actualmente nos parezca ridícula. Este es precisamente el objetivo del
trabajo del Ing. David Trejo, centrado en buscar nuevas formas de utilizar los
memristores. Se trata de unos exóticos dispositivos electrónicos cuya
existencia se confirmó en 2008. Estos aparatos almacenan información cuando
reciben corriente eléctrica y se están posicionando en chips específicos para
inteligencia artificial. Mientras la informática actual almacena la información
en forma de unos y ceros (binario), los memristores de Trejo pueden grabar
múltiples niveles de información”… “Con miles de memristores, en una placa se
pueden emular las redes neuronales de nuestro cerebro. El ingeniero ha creado
una placa que le permite hacer una red neuronal de ocho neuronas y trabaja en
otra de hasta 64.000. Es una escala de integración más grande que nunca se
había hecho antes", explica Trejo. Además, afirma que sus memristores
también podrían servir como chips especializados en computación cuántica. La
memoria RAM típica de la mayoría de los aparatos electrónicos permite almacenar
ceros y unos. Por el contrario, la innovación de Trejo permitirá almacenar al
menos ocho valores. "Esto es muy importante para la computación
neuromórfica", cuenta Trejo, es decir, para los sistemas que emulan las
sinapsis de las neuronas que forman nuestro sistema nervioso. Esto supondrá la
cuarta revolución de la electrónica: los procesadores que vienen preparados para
la inteligencia artificial. La aplicación de estos avances hará más rápidos los
procesos informáticos y aumentará la potencia de la computación actual. Los
chips de inteligencia artificial son algo que vamos a necesitar porque todas
las apps usan big
data e inteligencia artificial, y por esos nuestros smartphones
son lentos. Con chips de inteligencia artificial el procesamiento será mucho
más rápido y eficiente", añade Trejo. La directora de Telecomunicaciones
en la Universidad Nacional Autónoma de México, María de Lourdes Velázquez,
miembro del jurado de Innovadores 2019, cree que el proyecto de Trejo
"podría ayudar a acelerar el desarrollo de hardware para aplicaciones de
inteligencia artificial e internet de las cosas, y que podría lograr grandes
impactos en la constante evolución de la industria de la computación".
Lectura complementaria:
Notable logro para la carrera y señal de que la misión que se ha impuesto es la correcta. En horabuena y nuestro mejor deseo de más exitos.
ResponderEliminarGracias Jorge.
ResponderEliminarHola muy bueno, comparto.
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